La importancia de la salud mental en la infancia
La importancia de la salud mental en la infancia
Más Que Palabras | 25 de febrero de 2024
La salud mental es tan importante para el bienestar de un niño como su salud física. Puede afectar todos los aspectos de su vida, incluyendo su rendimiento educativo, relaciones y bienestar físico. Además, la salud mental puede cambiar con el tiempo, en diferentes grados de gravedad y por diversas razones.
¿Qué es una enfermedad mental?
La salud mental se refiere al bienestar general de cómo pensamos, manejamos nuestras emociones y nos comportamos. Una enfermedad mental también puede llamarse trastorno de salud mental. Se trata de patrones o cambios en el pensamiento, sentimiento o comportamiento que causan angustia o dificultan la capacidad de actuar. En los niños, las condiciones de salud mental a menudo se definen como retrasos o cambios en el pensamiento, comportamientos, habilidades sociales o control sobre las emociones. Estos problemas afectan a los niños y pueden dificultar su capacidad para actuar adecuadamente en casa, en la escuela u otros entornos sociales.
Detectando problemas de salud mental en niños.
Puede ser difícil detectar problemas de salud mental en niños debido a que el crecimiento típico durante la infancia implica cambios. Además, los síntomas pueden variar según la edad del niño. Los niños pequeños pueden no ser capaces de expresar cómo se sienten o explicar por qué se comportan de cierta manera. Las preocupaciones pueden evitar que los padres busquen ayuda para un niño que podría tener una enfermedad mental. Estas preocupaciones pueden estar relacionadas con el estigma asociado a las enfermedades mentales, el uso de medicamentos, el costo del tratamiento o dificultades para obtener ayuda.
Trastornos comunes en niños.
Algunos trastornos comunes relacionados con la salud mental en niños incluyen:
- Trastornos de ansiedad. Los niños pueden experimentar miedos o preocupaciones desproporcionadas que son difíciles de controlar. Estas preocupaciones afectan su participación en actividades escolares, sociales o lúdicas.
- Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Los niños con TDAH tienen dificultades para prestar atención, actuar impulsivamente o mostrar hiperactividad.
- Trastorno del espectro autista (TEA). El TEA es una condición neurológica que aparece en la infancia temprana y afecta la comunicación y conexión con otros, entre otras cosas.
- Trastornos alimentarios. Estos trastornos incluyen una obsesión poco saludable con el peso corporal, pensamientos desordenados sobre la alimentación y hábitos alimentarios peligrosos.
- Depresión y otros trastornos del estado de ánimo. Los síntomas pueden incluir tristeza persistente, pérdida de interés en actividades previamente disfrutadas y cambios en el apetito o el sueño.
Cómo ayudar a los niños a crecer emocionalmente sanos.
- Comunicación abierta. Habla con tus hijos sobre sus sentimientos y escúchalos sin juzgar.
- Fomenta habilidades emocionales. Enséñales a identificar sus emociones y manejarlas adecuadamente.
- Promueve un estilo de vida saludable. Buena alimentación, ejercicio regular y suficiente descanso son fundamentales para la salud mental.
- Busca ayuda profesional si es necesario. Si notas signos preocupantes, consulta a un profesional capacitado en salud mental infantil.
Recuerda que cuidar la salud mental desde una edad temprana es esencial para un desarrollo sano y feliz.
Bibliografía.
- Asociación Americana de Psiquiatría, Guía de consulta de los criterios diagnósticos del DSM 5. Arlington, VA, Asociación Americana de Psiquiatría, 2013.
- Clasificación Internacional de Enfermedades, undécima revisión (CIE-11). Organización Mundial de la Salud (OMS) 2019/2021.